Ubicada en una novena planta —equivalente a una quinta por altura real—, la propiedad destaca por su luminosidad excepcional, reforzada por su orientación sur y por grandes ventanales que permiten que la luz recorra cada estancia de manera natural. Los techos altos con vigas de madera vistas aportan personalidad y un carácter cálido que eleva la sensación de amplitud. Con tres dormitorios y dos baños, la distribución clásica ofrece múltiples posibilidades de reforma, contando además con el valioso respaldo de un arquitecto estructural propio en la finca, lo que facilita la personalización del proyecto según las necesidades del comprador.
El entorno residencial destaca por ser seguro, tranquilo y rodeado de servicios de alta calidad: colegios, centros médicos, parques, así como una amplia oferta comercial y gastronómica. La elevada demanda de alquiler —tanto residencial como comercial— asegura una rentabilidad sostenida y un notable potencial de revalorización a largo plazo, convirtiendo esta propiedad en una inversión estratégica y sólida.
Situada en una de las arterias más representativas de Madrid, la calle de Alcalá, esta vivienda se beneficia de una posición privilegiada, con vistas directas a la calle Goya y frente al icónico Corte Inglés. La excelente conectividad mediante metro (Goya), varias líneas de autobús y acceso inmediato a las principales vías de la ciudad permite desplazamientos ágiles hacia centros educativos, comerciales y de negocios. Su ubicación consolidada y altamente demandada la convierte en una opción ideal tanto para familias como para profesionales que buscan exclusividad, dinamismo y calidad de vida.
Esta propiedad prime combina arquitectura, luz y altura en un equilibrio perfecto, ofreciendo un hogar con alma y un activo patrimonial de alto valor en uno de los enclaves más prestigiosos de Madrid.